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EL CORRESPONSAL

Una canaria asume hoy como representante docente y estudiantil en Formación en Educación

Una canaria asume hoy como representante docente y estudiantil en Formación en Educación

URUGUAY, CANELONES, Solymar (www.elcorresponsal.com.uy) Rocío Martínez nació en Montevideo pero vivió siempre en Solymar, Canelones. Tiene 23 años y es estudiante de profesorado de Matemáticas en el Centro Regional de Profesores (Cerp) de Atlántida.

Hace prácticas de Didáctica de cuarto año en el liceo Nº 2 de El Pinar y trabaja de noche en el liceo de San Luis. Estudia de mañana, de 8.00 a 14.00.

Rocío Martínez asumirá oficialmente como consejera estudiantil en el Consejo de Formación en Educación (CFE), cargo que desempeñará junto con otras cinco mujeres: las estudiantes de magisterio Ana Vigánico (región Este), Kimberly Ledesma (región Litoral) y Gianina Raggio (región Suroeste); Camila Souto (región Norte), que estudia profesorado de Portugués, y Estefanía Barragán (región Centro), de Inglés

Todas ellas son integrantes de la lista 1, la única que se presentó en el orden estudiantil y que el 29 de mayo cosechó el apoyo de casi 60% de los votantes.

También hoy, luego del acto de designación que se realizará en el Cerp de la región Centro (en la ciudad de Florida), Rocío participará en la sesión del CFE, aunque el reglamento de funcionamiento le había llegado a su correo electrónico recién ayer.

Además de ella asumirá el profesor Edison Torres en representación de los docentes. Será la primera vez que un consejo en la órbita de la Administración Nacional de Educación Pública (ANEP) integra a un representante del orden estudiantil.

Este CFE será además, de forma transitoria, el que dirija la futura Universidad de Educación hasta la elección de sus autoridades. Sobre ésta y otras cosas, la diaria conversó con Rocío Martinez

-¿Cómo y cuándo comienza tu interés en participar en el movimiento estudiantil?

-En realidad es una construcción familiar.

Empecé a militar cuando era gurisa, a los 11 años, en el plebiscito por el agua. Arranqué con mi madre y seguí haciéndolo en el ámbito estudiantil.

En el liceo Nº 2 de Solymar, que está en Solymar Norte, armamos un gremio en 2007. En 2008 entré al Instituto de Profesores Artigas [IPA] ya con el plan nuevo, y en 2009 me cambié para el Cerp de Atlántida porque me quedaba más cerca.

-Los gremios de Formación en Educación estaban atomizados y ahora tienen una organización nacional.

¿Cómo se dio ese proceso?

-En 2009 el CFE empezó a mandar citaciones a los estudiantes, invitándolos a encuentros para discutir sobre el rol y el perfil del consejero estudiantil. Fue entonces que nos empezamos a juntar a nivel nacional, porque si bien existía coordinación en Montevideo, fundamentalmente entre el Centro de Estudiantes del IPA [CEIPA] y el Centro de Estudiantes de Magisterio [CEM], en el interior no había nada. Esos primeros encuentros fueron de estudiantes que estaban interesados en participar, y después se empezaron a conformar los centros de estudiantes en cada instituto.

Hoy se cuenta con un gran número de centros que están funcionando al firme, y hay otros en los que hay gurises interesados pero no cuentan con una estructura gremial sólida. En los primeros encuentros decidimos que no íbamos a participar en el Consejo porque considerábamos que una persona iba a estar representando al orden estudiantil a nivel nacional, pero no teníamos una estructura que sustentara el trabajo del compañero que iba a estar ahí. Entonces empezamos a crear la Agremiación Nacional de Estudiantes de Formación Docente, compuesta por todos los estudiantes agremiados, y hoy estamos marchando hacia la construcción de una federación.

-En la elección, el CEIPA y el CEM llamaron a anular el voto; sin embargo, conseguiste un apoyo relevante del total de votantes (59%). ¿Cómo valorás ese apoyo y la convocatoria a anular?

-Son diferentes posturas que uno toma desde su lugar, diferentes estrategias.

Creo que el objetivo de todos es el mismo: generar una educación plural para todos. Algunos teníamos la postura de que la voz de los estudiantes tiene que ser escuchada y para generar más participación había que ser parte del Consejo; otros pensaban que no.

-¿Cómo van a trabajar?

-Como una comisión o colegiado, para discutir entre las seis todos los temas. Decidimos rotarnos porque sabemos que la dedicación de tiempo puede implicar que nos atrasemos en la carrera. Por ahora nos comunicamos vía correo electrónico y a veces nos juntamos. La idea es crear comisiones temáticas.

-¿Qué implica asumir el cargo?

-Es un cargo no rentado, por lo que forma parte de la militancia de cada uno. Implica tener reuniones y hay que cumplir con las mismas tareas que tienen los consejeros y estar en la toma de decisiones que hacen a la formación docente. Hay que interiorizarse sobre los temas, estudiarlos, discutirlos en las bases y tomar las decisiones en el consejo. Está bueno aclarar esto, porque como uno de los argumentos que manejaron cuando se discutía si había que estar o no en el Consejo se llegó a decir que íbamos a ganar 70.000 pesos, y eso es mentira.

-El sistema que se generará es nuevo y particular. ¿Cómo lo evaluás?

-Es que es la primera vez que vas a tener a un estudiante formando parte de un consejo y tomando decisiones en la ANEP. Además, fue electo en una lista en la que hay más personas. Una forma podría haber sido rellenar con gente, pero ésa no fue la decisión, sino trabajar en conjunto. Sé que en las sesiones podemos participar todas, y de lo demás no se sabe mucho porque está en creación. Una de las cosas que pensamos proponer es que haya sesiones en el interior del país.

-Ustedes presentaron una plataforma para las elecciones. ¿Cuáles son las iniciativas que plantearon en ella?

-Destacamos dos consignas fundamentales: la autonomía y el cogobierno de la educación pública, y que se respeten estos dos principios en la nueva Universidad de Educación; que haya un cogobierno con paridad de órdenes y que estén todos los actores representados. Si bien nosotros estamos participando en este consejo, no desconocemos que no estamos en igualdad de condiciones. Ahora hay cinco integrantes: tres designados por el Consejo Directivo Central, uno por los docentes y otro por los estudiantes.

Con relación a la realidad del día a día de los estudiantes vamos a comenzar trabajando en el tema de los reglamentos de becas y, en la parte académica, en los cursos de Didáctica de las diferentes carreras. En ningún reglamento de becas hay participación de los estudiantes para definir a quién se le otorga y a quién se le quita una beca. Los reglamentos tienen aspectos que no son claros y otros que quedan a criterio de los directores de los institutos. Los Cerp son los que cuentan con residencia propia y tienen reglamentos internos de residencia.

Creemos que la participación de los estudiantes debería haberse dado en la creación de ellos. Muchas veces son reprimidos en residencias o en las instituciones en general, por formar un centro de estudiantes, por ejemplo.

Hay varios tipos de beca: transporte (contamos con micros propios), alimentación (incluye almuerzo según dónde se resida o en la cantina del instituto al que se concurra), de alojamiento (institutos de residencia, o habilitar lugares donde estar), y una beca total que reúne todo lo anterior. Hay también una beca económica mensual para estudiantes a los que les quedan cuatro o cinco materias para recibirse.

Hay dificultades en el otorgamiento.

Por ejemplo, este año hay estudiantes que solicitaron la beca a principio de año y aún no han tenido respuesta por problemas administrativos. En algunos casos no hubo una respuesta clara. Se pierde la información en el camino y hay estudiantes en todo el país que están en esa situación. Esto es relevante porque ellos lo necesitan. En el Cerp de Atlántida, por ejemplo, los micros estuvieron sin funcionar tres semanas e hicimos una colecta para poder pagarles el boleto a los compañeros que no podían ir a clase.

-¿Cuál es la postura de ustedes sobre la educación en formación docente privada?

-Estamos en contra porque consideramos que la educación no tiene que estar en manos de privados. La educación es un derecho humano, tal como lo define la Ley de Educación, y no estamos de acuerdo con que se lucre con esto. Patricia Pujol y Luis Rómboli LA DIARIA/  SOCIEDAD/ 01/08/2013/  Página 5

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