Falleció don Gregorio García Cecilio, el canario más anciano
CASTELLANOS (2300) Con 103 años cumplidos, falleció don Gregorio García Cecilio, el canario más anciano. Don Gregorio, nació en 1906, dos años después de la guerra político partidaria de 1904 entre blancos y colorados. El, de filiación blanca, tuvo 4 hijos, varios nietos y 21 biznietos. Don Gregorio se mantenía con una lucidez y una salud extraordinarias.
Esbelto, delgado y completamente erguido, su cabello blanco lo hacía parecer aún más alto que el metro setenta centímetros que era su altura. Cuando cumplió 100 años, se lo festejaron en el Club Artigas Varela de Castellanos, localidad canaria de donde fue vecino y productor rural durante muchos años. Don Gregorio concedió entonces un reportaje a El Corresponsal en el domicilio de una hija, en Montevideo.
Aún recordaba claramente los nombres de sus vecinos de sus años vividos en Costa del Colorado. Dijo que viajar a Montevideo en tren, costaba: 60 centésimos, y 40 centésimos si era en ómnibus, desde San Antonio. El pueblo Castellanos que frecuentó tantos años, fue fundado por Alfredo Castellanos, 2 años después de que naciera don Gregorio. Este conocido hacendado canario, don Horacio Castellanos, pidió una parada de tren a instalarse dentro de lo que era su estancia, y alrededor nació el caserío que se conoce como Estación Castellanos.
Don Gregorio vivió sus últimos años en casa de una de sus hijas Herminia, en la calle Trento, cerca del Mercado Modelo, recordando como enviaba los productos de su granja al Mercado Modelo desde costas del arroyo Colorado. Lo hizo hasta que cumplió 81 años y lo hacia desde que tenia 16. Don Gregorio, que nació en la zona rural de Santa Rosa-seccional 13 policial y judicial- se casó poco antes de los 20 años y luego de trabajar en la tierra de su familia, logró comprar su propio predio. A pesar de tener una de sus manos torcida por una herida por disparo accidental de su escopeta, a los 16 años, igual atendió a su familia, trabajando la tierra interrumpidamente durante 71 años. Fue a la Escuela 25 de Costas del arroyo Colorado.
ANECDOTA.
En 1924 le tocó votar por primera vez. Cuenta que, como aún no era obligación votar y siendo blanco (nacionalista), un amigo de la zona -colorado, le propuso un pacto de caballeros: “mirá, nos quedan como 4 leguas la mesa 1 de votación en Santa Rosa, pero no es obligación ir a votar. Si vos estás de acuerdo nos vamos a pescar los 2 y perdemos a medias. Vos le restas un voto a tu partido y yo al mío”. Así fue, pero fue la única vez.
Nunca más dejó de votar durante las siguientes 17 elecciones nacionales, que ha tenido Uruguay desde entonces, “siempre por el Partido Nacional” aclara.
Conoció a Herrera, y a Benito (Chicotazo) Nardone, con quien dice haber discutido por asuntos políticos. También conoció a Wilson Ferreira Aldunate y más acá al ex presidente Lacalle. Hoy dice orgulloso que vota a su hijo, el diputado Luis Lacalle Pou, el que en cada elección almuerza con don Gregorio, en casa de uno de sus hijos en Castellanos.
Finalmente don Gregorio dijo que de las cosas que le hubiera gustado hacer era: ir al lugar de la batalla de Masoller o a la estancia del Cordobés.
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