José Luis Birriel (Prosegur) "Entre la plata o la vida, elegí la vida".

URUGUAY, CANELONES (www.elcorresponsal.com.uy) José Luis Berriel (52) es el guardia de seguridad que recibió la peor parte en el asalto a la remesa frente al Palacio Legislativo. Recibió 6 tiros, sigue internado en el CTI del Hospital Policial y cuatro de los 6 disparos dieron en su cuerpo. Le amputaron parte de un dedo de la mano izquierda. 
Está internado fuera de peligro de perder su vida en el CTI del Hospital Policial. En la tarde de ayer, atendió una llamada del conductor del programa Malos Pensamientos, Orlando Petinatti. Posteriormente, las autoridades del centro asistencial le retiraron el celular. Durante la conversación con el conductor radial el trabajador agradeció las muestras de solidaridad.
Por otro lado, se refirió a la decisión de cubrir con su cuerpo a una mujer y una niña que se encontraban en medio del tiroteo. "Entre la plata y la vida, me quedo con la vida", afirmó. 
Dos o tres disparos le rozaron la cabeza. Contó que sentía que estaba lleno de sangre y que no entendía cómo era que seguía razonando puesto que suponía que las heridas eran aún más graves. El trabajador no aceptó que se diga que es un héroe. "Lo que hice es de buena gente nomás", afirmó Berriel.
Consultado sobre si sabían que "algo grande" iban a pasar, el guardia dijo que hay comunicación entre la Policía y las empresas de seguridad. "¿Qué vamos a hacer tres tipos afuera y dos adentro contra 10 que están tirando a diestra y siniestra?", se preguntó.
El guardia admitió que cuando sale de su casa teme no llegar al trabajo. "Te pueden rapiñar en cualquier lado, en el ómnibus, donde sea. Esto se fue al carajo", dijo. No obstante, mencionó que las leyes deben ser "más drásticas" porque están "muy blandas".
Berriel trabajó 30 años en la Jefatura de Canelones hasta que se retiró. Estuvo en varias comisarías. Hace dos años que se desempeña en una empresa de seguridad y seis meses que hace custodia de valores, según contó a El País su hijo Matías.