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EL CORRESPONSAL

Bajaron las aguas dejando al descubierto la negligencia gubernamental

URUGUAY, CANELONES, Ciudad de la Costa (www.elcorresponsal.com.uy) Las piscinas de la Ciudad de la Costa. Las lluvias intensas se conjugan con malos fraccionamientos de tierras. Las piscinas de la Ciudad de la Costa Las lluvias intensas se conjugan con malos fraccionamientos de tierras.

Cada vez que las lluvias se precipitan sobre los balnearios de la Ciudad de la Costa, casi nadie se salva de que por lo menos parte de los jardines de sus casas se conviertan en piscinas, y los caminos se vuelvan intransitables. Varias son las causas.

 La Ciudad de la Costa, por su topografía, es una zona muy compleja, "es un billar, por lo cual, si al saneamiento queremos darle condiciones infraestructurales y ambientales adecuadas a las poblaciones que se afincaron fuera de las normas legales estatuidas, eso exige una costosísima inversión", dijo a el País el arquitecto Mariano Arana.

 Las condiciones de salubridad ambientalmente interesantes que fueron a buscar los montevideanos y otros uruguayos que se mudaron a los balnearios de la Ciudad de la Costa, hoy "se empiezan a revertir, porque si no existe saneamiento y el cambio climático está complicando el mantenimiento razonable que pudieron haber tenido en sus inicios esos afincamientos, ahora la situación se vuelve más compleja.

Es muy ilusorio o demasiado aventurado pensar que las manchas urbanas pueden seguir creciendo. ¿Quién paga los transportes colectivos que están siempre subsidiados? También es de altísimo costo hacer una infraestructura vial estabilizada. Debemos tener formas equilibradas y responsables de aceptar hasta cierto punto las demandas y negarse a otras", comentó el arquitecto Arana.

 "Hay que hacer un llamado a la responsabilidad de todos, y lo digo en un sentido técnico. Las situaciones de este año no fueron peores que las de 2007, pero el volumen de lluvia caído en pocas horas hizo colapsar varias zonas de Canelones, con una gran cantidad de caminería, lo que exige tener planificación territorial acorde".

 De no efectuarse la planificación territorial acorde con las posibilidades de las localidades, "los gobiernos departamentales se van a ver obligados, si no tomaron las prevenciones técnicas rigurosas, a recurrir a la sociedad en su conjunto. Para los apoyos que deben solicitarse a nivel global, antes debe actuarse con un criterio de planificación responsable.

Hay que releer y aceptar la Ley de Ordenamiento Territorial y Desarrollo Sostenible (de 2008), que no se ha inventado de cero, sino que responde a lo mucho y bueno que contiene en particular la normativa que proviene de España, de Colombia o de Brasil. De esa forma se puede mitigar el problema, no digo que lo evitemos", sostuvo Mariano Arana, quien en 2005 asumió como Ministro de Vivienda.

 Otra norma destacada por el arquitecto y no considerada en los hechos al momento de construir en los balnearios de la Ciudad de La Costa, así denominada en 1994, es la promovida en 1946 por el arquitecto y parlamentario Horacio Terra Arocena, y conocida como Ley de Centros Poblados.

 "No logró ser respetada en todos los casos, después de tener setenta años de vigencia. Ya en los años ´50 hubo loteamientos absolutamente fraudulentos. Para aceptar un fraccionamiento había que asegurarse ciertas condiciones infraestructurales mínimas que se debían otorgar por parte del promotor inmobiliario. desgraciadamente no se cumplió con esos extremos; los gobiernos departamentales siempre han tenido problemas, vamos a decir la verdad, y entonces, procurando incrementar sus recursos a través de los impuestos, fueron excesivamente permisivos, hasta tal grado de no cumplir con las normas vigentes, y a la larga eso se paga", indicó Arana.


 A mediano o a largo plazo, es posible que la ciudad costera continúe extendiéndose y llegue hasta el Chuy en forma lineal.´esta es una conjetura del arquitecto que le preocupa.

 "La instalación de fajas circulatorias demasiado cercanas a la costa puede impedir la regeneración de la arena y el natural mantenimiento de un atractivo natural fuerte de nuestro país, atacado por loteamiento indiscriminado", concluyó.

 El alcalde de la Ciudad de la Costa Omar Rodríguez relato que hace mas de 40 años un conglomerado de balnearios con "dos o tres casas por manzanas". Jamás imaginó que el lugar de veraneo para muchos montevideanos y de residencia para unos pocos, se convertiría en la ciudad más grande del departamento canario, con el mayor crecimiento demográfico de América Latina, y que él sería el primer alcalde del lugar.

 Pero además de poblador desde antes de que fuera ciudad, Rodríguez trabajó 28 años en una inmobiliaria y fue chofer de ambulancias durante 16 años. Con esto, acumuló enormes conocimientos "no técnicos" como se ocupa de aclarar permanentemente, sobre la geografía del lugar, su evolución y construcción entre desordenada y anárquica.

 "Hubo un gran crecimiento acompañando valores inmobiliarios, algunos de bajo porte, que aprovecharon parejas jóvenes o vecinos de Montevideo" . El crecimiento se estancó cuando pasó a ser un negocio y los precios crecieron. Esa explosión demográfica la convirtió en una ciudad sin planificación alguna.

 Desde el año 1994 "nos declararon ciudad pero no fue creada como tal. Hay muchos vecinos viejos que se molestan y que guardan la ilusión de vivir en un balneario".

 Solo se conserva El Pinar como el gran lugar de terrenos amplios, espacios arbolados y limpios, aunque ya también va en proceso de ampliar su casco de ciudad.

 Nunca debieron venderse terrenos que se rellenaron solo para la transacción económica. "El Liceo de Solymar está construido sobre un lago", ejemplificó el alcalde. Esto es preocupa y explica por qué se dice que las napas están altas y fluyendo. Es más, explicó que se nota cuando las obras de saneamiento avanzan, cómo a 40 centímetros del suelo comienza a salir agua. Decían los poceros de antaño que, a cinco metros, había agua potable.

"Sobre eso vivimos". Rodriguez afirmó que las cunetas son importantes para que los drenajes canalicen bien el agua, pero el desafío municipal es hacer los cruces de calles y que el vecino haga las entradas con los caños adecuados. (EL PAIS/ CIUDADES/SEGUNDA SECCION/ 23/02/2014/Página 1)








1 comentario

daniel -

queda claro que las intendencias son un desastre , los politicos , los tecnicos , los funciomarios son burros para ejecutar los planes que se neccesitan , acomodos, se arreglan construccciones en lugares que no se puede, en fin todos sabemos como se arregla es una corruptela gigante acompañada de ineptitud, y habla el oraculo de Arana
que se deje de joder este inutil, proque no contratan a gente que sepa y haga las obras ,porque la pobre gente sigue pagando y esto inutiles siguen hablando